George Lucas tenía una empresa titánica entre manos: hacer otra trilogía de Star Wars que por lo menos, no digo superase a la trilogía original, pero si que fuera bastante digna. Esto por supuesto no sucedió, ya que estas tres películas, que se sitúan cronológicamente antes que las originales, fueron una decepción, aunque he decir que el Episodio I la habré visto cerca de una decena de veces y no me parece tan mala. Por supuesto esta trilogía sin ser gran cosa es bastante mejor que la tercera trilogía, que es infumable, sobretodo el capítulo VIII,
Aunque esto va por gustos, lo que esta claro es que esta nueva trilogía fue realizada pensando no tanto en los fans de las películas clásicas, sino en las nuevas generaciones. Esto que por una parte es entendible, nos deja con unas películas que no tienen la misma esencia que las originales. Lo vemos muy bien en este Episodio II: El Ataque de los Clones, en donde los cambios de secuencia son excesivos para lo que nos tiene acostumbrados la saga, lo que claramente está dirigido a nuevos espectadores.
Esto podemos verlo con sus dos protagonistas: Ewan McGregor y Hayden Christensen, que tienen que separarse, y por tanto cada uno de ellos vive acontecimientos diferentes. Estos continuos cambios entre uno y otro es un error, ya que en la trilogía original hay tan solo un par de cambios de secuencia que cambian la acción a otro lugar. Las películas actuales nos han acostumbrado a una acción rápida, y es por ello que puede estar en parte condicionada por lo que se espera de estrenos actuales.
En este Episodio II hay otra cosa mas que no termina de funcionar, y es que haya toques de película de acción o de comedia romántica. Por ejemplo la secuencia en la que Obi Wan y Anakin persiguen a un coche volador, es totalmente prescindible, y cuando la estaba viendo pensaba que podría perfectamente haber sido parte de la película El Quinto Elemento. Además este toque romántico entre Anakin y Padme hace que la primera mitad la película sea insufrible.
No me gusta ser demasiado negativo y ver solo las cosas malas o no demasiado buenas, por que este Episodio II tiene buenos momentos, como la batalla con los clones o ver el proceso de Anakin que le llevará a convertirse en Darth Vader. Esta Ataque de los Clones es medianamente entretenida, aunque hay que superar su aburridísima primera mitad.
Esto podemos verlo con sus dos protagonistas: Ewan McGregor y Hayden Christensen, que tienen que separarse, y por tanto cada uno de ellos vive acontecimientos diferentes. Estos continuos cambios entre uno y otro es un error, ya que en la trilogía original hay tan solo un par de cambios de secuencia que cambian la acción a otro lugar. Las películas actuales nos han acostumbrado a una acción rápida, y es por ello que puede estar en parte condicionada por lo que se espera de estrenos actuales.
En este Episodio II hay otra cosa mas que no termina de funcionar, y es que haya toques de película de acción o de comedia romántica. Por ejemplo la secuencia en la que Obi Wan y Anakin persiguen a un coche volador, es totalmente prescindible, y cuando la estaba viendo pensaba que podría perfectamente haber sido parte de la película El Quinto Elemento. Además este toque romántico entre Anakin y Padme hace que la primera mitad la película sea insufrible.
No me gusta ser demasiado negativo y ver solo las cosas malas o no demasiado buenas, por que este Episodio II tiene buenos momentos, como la batalla con los clones o ver el proceso de Anakin que le llevará a convertirse en Darth Vader. Esta Ataque de los Clones es medianamente entretenida, aunque hay que superar su aburridísima primera mitad.
LO MEJOR
Ver el proceso que lleva a Anakin a convertirse en Darth Vader
LO PEOR
La trama romántica entre Padme y Anakin
Por momentos se hace insufrible